El telescopio Liverpool comenzó en 1996 como un proyecto conjunto de la Universidad Liverpool John Moores y el Observatorio Royal Greenwich, pero vio su primera luz en julio de 2003.
Aunque la ingeniería del LT es similar a la de otros telescopios del Roque de los Muchachos, su mecánica particular es única y está diseñado para funcionar de manera autónoma, bien de forma remota desde Liverpool, bien en modo robótico a través de observaciones controladas por un software de ordenador.
Liverpool es capaz de detectar fenómenos astronómicos transitorios como las novas, las supernovas y las explosiones de rayos gamma, las fuentes de energía más brillantes del universo. Además, este telescopio colabora activamente en la misión del satélite SWIFT, para el descubrimiento de este tipo de explosiones.
Photo Credit: Daniel López – IAC
Fuente: IAC